Escuela "Berceau" 2024 - III Cohorte.
Después de un largo viaje para algunos, la llegada resulta cansadora. Otros en cambio, llegan de distancias más cortas. El recibiendo por parte de la Hna Juana Araujo y el Padre Gustavo González fue cálida y cercana, ante los interrogantes con los que todos llegábamos, prevalecían las expectativas en todos.
Por la noche se comparte la Misa y la cena, momento en el cual empezamos a conocernos un poco. Después de una jornada larga nos encontramos en nuestros cuartos para descansar y motivados por el inicio del lunes.
Lunes: “El comienzo”
De a poco se van armando los grupos que se caracterizan por combinar comunidades y nacionalidades. Se realizan diferentes actividades de formación, dinámicas grupales, oración y empezamos a sentir la distancia respecto a nuestros núcleos, si bien el ambiente entre nosotros se tornada de apertura y predisposición al encuentro, finalizamos la jornada cosechando diversas enseñanzas tanto formales como vivenciales.
Martes: “La organización”
Nuestra jornada se basó en buscar, representar la organización como nota característica del Carisma Vicentino y en esa búsqueda descubrimos la diversidad de personalidades, enfoques, formas de trabajar, situación en la cual sentimos un desafío que con el pasar de las horas pudimos resolver, validando la posibilidad del desencuentro. Sin embargo, al estilo Vicentino descubrimos también, que existe una organización que a veces no buscamos, pero logramos.
Miércoles: “La ternura”
Las actividades realizadas nos llevaron a visualizar en diferentes situaciones una presencia, sencilla y delicada: el valor de la ternura representada de manera particular en Santa Luisa de Marillac. A través de los espacios de formación y los encuentros espontáneos pudimos sentir como algunos vínculos empezaron a fortalecerse y para lograrlo, fue necesario aprender a contemplar a la otra persona y aceptarla.
Jueves: “El encuentro”
Jornada diferente que nos invita a encontrarnos con las Hijas de la Caridad y una misión muy especial: la asistencia a personas con lepra y dificultades de salud mental, el Leprocomio. Cada uno de los participantes habrá experimentado una emoción particular ante el encuentro con una situación de dolor, situación que nos permitió vivenciar el encuentro con el otro y poder ver el rostro de Jesús presente en los más vulnerables y también en cada uno de nosotros, cosechando la percepción más afinada de la conexión con la otra persona.
La interpelación de la vida de San Vicente y su contexto nos llevaron a darle sentido a todo aprendido durante estos días, logramos comprender el encuentro que genera en él la conmoción al atravesar la misma situación. Y no tomar una actitud indiferente antes las realidades observadas.
Viernes: “Volver”
¿Cómo será encontrarnos con nuestro entorno cotidiano? Que si bien seguirá siendo el mismo, volvemos en parte con el corazón transformado, y con ansias de volver a encontrarnos.
Verónica Zalazar - Nadia Franov
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